Nos hemos sumergido en un viaje de exploración sobre el futuro de la vivienda, re imaginando cómo podríamos habitar de manera innovadora. Transformamos una parte de nuestra oficina en un laboratorio donde recreamos un hogar inspirado en un futuro distópico, donde anhelamos la conexión con la naturaleza, la amplitud de los espacios abiertos, la cálida luz del sol y el contacto humano. En este entorno, las estancias carecen de límites definidos, sin una disposición fija, utilizando elementos de la naturaleza muerta, materiales en estado bruto y objetos heredados del pasado. Este proyecto es una invitación a la reflexión, una fuente de nuevas ideas y un espacio para la creatividad.